Mi hijo hizo de un amigo en la escuela, me dice que es un chico muy simpático, pero algo extraño, que le gustan cosas que no a todo chico le gustan. Hoy me pidió permiso para ir a su casa, yo le dije que no, pues es muy nueva su relación como para darle permiso, que mejor se junten en la plaza. Llegó la tarde y el amigo de mi hijo vino a casa por él, en realidad era un niño algo extraño. Se fueron a la plaza y mi hijo tardaba mucho en volver, salí a buscarlo y al llegar vi algo terrible, mi hijo estaba a punto de colgarse de una cuerda atada al cuello amarrada a un árbol. Fue horrible, justo llegué para salvar su vida. Entrando a casa le dije que me explicara lo sucedido, se puso a temblar de miedo y me contó que su amigo le había incitado a ahorcarse. Yo no podía creer lo que pasaba, esperé que llegara la hora de escuela y me fui para buscar al supuesto amigo de mi hijo, pero nunca llegó, me fui a la policía y les expliqué lo sucedido, me dijeron que no era el primer caso similar al mío, que había más familias que habían llegado al barrio y que sus hijos habían pasado por lo mismo. Ese supuesto amigo era un espíritu de un niño que había muerto de una manera muy terrible, sus padres lo habían ahorcado por tener problemas entre ellos y no querían que el niño quedara vivo para irse con alguno de los dos. Dicen que el niño, a los pocos días de muerto, se desenterró con alguna fuerza maligna y mató a sus padres de la misma forma que lo mataron a él: los hacía ahorcarse. Desde ese tiempo, toda familia nueva que llega al pueblo que cuente con algún hijo de esa edad ocurre la misma historia, solo que algunas familias no han logrado evitar las muertes y sus hijos se han ido para siempre. Yo soy la hermana de la madre del niño, el que casi se ahorca en la plaza… ese día que mi hermana llegó de la policía, había dos cuerdas atadas al techo de la casa, en una estaba su hijo ya muerto y la otra, en su desesperación por haber perdido a su hijo fue utilizada por ella…